El fallecimiento de Ryan O’Neal ha sido revelado, arrojando luz sobre la valiente batalla del actor contra la leucemia crónica y el cáncer de próstata. Ryan falleció pacíficamente el 8 de diciembre, rodeado de sus seres queridos, según su hijo Patrick. Tenía 82 años.
Según un certificado de defunción obtenido por The Blast, Ryan falleció de insuficiencia cardíaca congestiva, después de sufrir de cardiomiopatía durante años.
En una emotiva publicación de Instagram, Patrick rindió homenaje a la vida extraordinaria de su padre, describiéndolo como una leyenda de Hollywood y compartiendo recuerdos entrañables de su tiempo juntos.
La carrera de Ryan despegó con su papel destacado en Love Story, y continuó dejando su huella en la industria con películas como What’s Up, Doc?, Paper Moon y Barry Lyndon.
A pesar de su éxito en la pantalla, Ryan enfrentó desafíos personales, incluida una tumultuosa relación con la actriz Farrah Fawcett. Los dos compartían un hijo, Redmond, y experimentaron altibajos a lo largo de su relación de 30 años. Los hijos de O’Neal, Tatum, Griffin, Patrick y Redmond, a menudo acapararon titulares debido a sus dinámicas complejas con su famoso padre.
En un giro significativo, Ryan y Tatum O’Neal se reconciliaron en septiembre de 2020 después de 17 años de distanciamiento. El encuentro familiar, que incluía a los hijos de Tatum, marcó un momento conmovedor de sanación y unidad. La familia O’Neal enfrentó tensiones publicitadas, con altercados entre Ryan y Griffin que datan de 1983.
Nacido el 20 de abril de 1941 en Los Ángeles, Ryan inicialmente buscó una carrera en el boxeo antes de pasar a la actuación. La actuación de O’Neal en Love Story le valió una nominación al Oscar, pero sus películas posteriores tuvieron éxito mixto.
Su vida personal estuvo marcada por matrimonios con las actrices Joanna Moore y Leigh Taylor-Young, con quienes tuvo hijos. El amor de O’Neal por Fawcett perduró a pesar de sus desafíos, y él se abrió sobre su relación en el libro de 2012, Both of Us: My Life With Farrah.
En los años 80 y 90, la carrera cinematográfica de O’Neal tuvo altibajos, pero continuó trabajando con principales actrices como Katherine Hepburn y Cher. Su último papel importante fue como Max Keenan en la serie de Fox, Bones, un personaje que interpretó desde 2006 hasta 2017.
Ryan es sobrevivido por sus cuatro hijos y nietos, dejando atrás un legado que trasciende la pantalla plateada.