El riesgo de que los precios de los automóviles eléctricos chinos se disparen en la UE podría estar disminuyendo después de que ambas partes acordaron negociar una serie planificada de impuestos a las importaciones.
Altos funcionarios de ambas regiones hablaron sobre los aranceles en una llamada telefónica el sábado y acordaron discutirlos más a fondo, aunque persisten las fricciones.
La llamada marca la primera vez que las dos partes acuerdan negociar desde que la UE amenazó a China con aranceles a los vehículos eléctricos (EV) de hasta el 38%.
La UE dijo que los vehículos eléctricos chinos estaban subsidiados injustamente por su gobierno. En respuesta, China acusó a la UE de proteccionismo y violaciones de las normas comerciales.
Un portavoz de la UE dijo a la BBC que la llamada entre el Comisario de Comercio Valdis Dombrovskis y su homólogo chino Wang Wentao fue «sincera y constructiva».
Dijeron que las dos partes «seguirán colaborando a todos los niveles en las próximas semanas».
Sin embargo, el portavoz también redobló la oposición de la UE a cómo se financia la industria china de vehículos eléctricos.
Dijeron que “cualquier resultado negociado” de los aranceles propuestos debe abordar los “subsidios perjudiciales” de los vehículos eléctricos chinos.
China emitió una declaración similar el sábado y dejó claro que todavía no estaba de acuerdo con la UE.
Además de su llamada a la UE, Wentao se reunió el sábado con el vicecanciller y ministro federal de Asuntos Económicos y Acción Climática de Alemania, Robert Habeck.
En una publicación de Facebook sobre la reunión, el Ministerio de Comercio de China dijo que le había informado a Habeck sobre su “firme oposición” a los aranceles.
Reiteró su amenaza de presentar una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) «para defender firmemente sus derechos e intereses legítimos».