El capitán de los Giants, Toby Greene, ha recibido una suspensión de un partido después de hacer contacto alto con Jordan Boyd de Carlton durante la victoria por 19 puntos de los Blues en Marvel Stadium el sábado por la tarde.
El oficial de revisión de partidos, Michael Christian, calificó la ofensa de Greene como conducta descuidada de impacto medio y contacto alto, y le impuso una sanción de un partido como castigo.
Pero la victoria de los Blues viene con un costo aún mayor para los Giants, ya que dos de las opciones clave de ataque del equipo podrían estar fuera de juego la próxima semana, con el delantero clave Jesse Hogan también suspendido.
En el cuarto trimestre, Greene saltó al aire en un concurso de marcas, extendiendo su pierna y girando su cuerpo en el último segundo cuando Boyd también despegó para disputar el balón. El choque hizo que el hombro de Greene chocara con la cabeza de Boyd, quien recibió un tiro libre por el contacto.
Boyd no abandonó el campo después del incidente y jugó el resto del partido.
Por otro lado, Hogan también recibió una suspensión de un partido por golpear al defensor de Carlton, Lewis Young, fuera del juego en el último cuarto. A pesar de que fue un golpe de alta intensidad, Young no necesitó atención médica.
Ambos jugadores no estarán disponibles para el partido de la séptima jornada de los Giants contra los Lions en el Manuka Oval de Canberra el jueves por la noche.
El entrenador de los Giants, Adam Kingsley, estaba seguro de que Greene escaparía de una suspensión, justificando que el jugador estaba en su derecho de utilizar su cuerpo para disputar el balón.
Con estas suspensiones, los Giants tendrán que enfrentarse a los Lions sin dos jugadores clave en su ataque, lo que sin duda afectará su desempeño en el próximo encuentro.