Las máquinas de helado de McDonald’s han desarrollado una mala reputación por estar rotas cuando visitas el restaurante, en gran parte debido a estrictas leyes de derechos de autor que solo permiten que técnicos con licencia especial puedan repararlas legalmente. Los fabricantes tienen que certificar a cada técnico y colocan cerraduras en las máquinas de McFlurry para evitar que otros las reparen.
Sin embargo, 404 Media descubrió una nueva decisión federal el viernes pasado que declara que los técnicos pueden legalmente hackear las cerraduras colocadas en las máquinas de McFlurry por el fabricante. Esto significa que más técnicos podrán reparar las máquinas de helado de McDonald’s y es ampliamente visto como una victoria para la comunidad del derecho a reparar.
iFixit, que publica tutoriales para la comunidad de reparación de tecnología, publicó un desglose de las máquinas de McFlurry el año pasado, mostrando cómo evitar estas cerraduras con un dispositivo simple, que McDonald’s anteriormente les pidió a los propietarios de franquicias que no utilizaran. Ahora, los propietarios de franquicias son libres de usarlos.
En resumen, la nueva reglamentación federal que permite a los técnicos hackear las cerraduras en las máquinas de helado de McDonald’s es una buena noticia para la comunidad del derecho a reparar, ya que permitirá más reparaciones y evitará que las máquinas estén constantemente fuera de servicio. Esta decisión marca un paso hacia adelante en la lucha por los derechos de los consumidores y la sostenibilidad de los productos electrónicos.