La renuncia de la Cámara del ex presidente Kevin McCarthy (R-CA) tuvo efecto el domingo, dejando a los republicanos con una mayoría mínima de 220-213 sobre los demócratas tras la expulsión de George Santos (R-NY) a principios de diciembre.
McCarthy dio un discurso de despedida en el pleno de la Cámara el 14 de diciembre. En su carta de renuncia al gobernador Gavin Newsom (D-CA), McCarthy agradeció por el apoyo recibido durante su tiempo en el cargo.
El video del discurso de despedida se encuentra disponible en línea para aquellos que deseen verlo. McCarthy, de 58 años, sirvió como presidente de la Cámara durante nueve meses, habiendo sido destituido el 3 de octubre tras la aprobación de una moción presentada por el representante Matt Gaetz (R-FL) que fue aprobada con una mayoría de votos.
La noticia sobre la renuncia de McCarthy ha generado reacciones mixtas dentro del partido, con algunos miembros expresando su apoyo al ex presidente y otros expresando su descontento. Algunos incluso han acusado a McCarthy de haber realizado acuerdos secretos con el partido demócrata, lo que ha provocado divisiones y tensiones internas en el partido republicano.
La renuncia de McCarthy estuvo precedida por una serie de controversias, incluyendo su manejo de negociaciones sobre el techo de deuda y acusaciones de acuerdos secretos con el partido demócrata. Estos eventos, junto con la pérdida de confianza por parte de algunos miembros del partido, finalmente llevaron a su renuncia.
El legado de McCarthy en la Cámara incluye la reapertura del Capitolio al público y la eliminación de la votación por proxy, así como la eliminación de los detectores de metales en las puertas del pleno de la Cámara.
En una declaración, McCarthy expresó su optimismo sobre el futuro y su compromiso de continuar apoyando a la próxima generación de líderes republicanos. Aunque su renuncia marca el final de su mandato en la Cámara, McCarthy dice que su trabajo apenas comienza y que seguirá sirviendo a Estados Unidos de nuevas formas.
En resumen, la renuncia de McCarthy ha marcado el final de una era en la Cámara de Representantes, pero también representa un nuevo comienzo y la oportunidad para una nueva generación de líderes republicanos.