Los acontecimientos políticos en Estados Unidos continúan generando controversia y debate, especialmente en torno a las elecciones presidenciales de 2020. Recientemente, el abogado personal de Joe Biden, Bob Bauer, ha declarado que está preparando para impugnar los resultados de las elecciones de 2024. Según lo informado por Politico, Bauer señaló que ha observado a funcionarios electorales expresar su insatisfacción con los resultados y la posibilidad de bloquear la certificación, como sucedió dramáticamente en Michigan en 2020.
En contraste, en 2020 el presidente Trump logró obtener más votos que cualquier presidente en ejercicio en la historia de Estados Unidos. Su aumento de 12 millones de votos respecto a su victoria inicial en 2016 es un dato relevante a tener en cuenta. En esa misma contienda electoral, Biden ganó la menor cantidad de condados de cualquier presunto «ganador» en la historia, con solo el 16% de todos los condados de EE. UU. a su favor.
El entorno político sigue siendo polarizado, con acusaciones de fraude electoral en diferentes estados clave durante las elecciones pasadas. La maquinaria demócrata produjo 81 millones de papeletas en 2020 y se espera que repita la misma estrategia en el futuro. La figura de Joe Biden, con sus limitadas apariciones públicas y problemas de convocatoria, es otro punto de crítica para sus oponentes.
Las acusaciones de fraude en estados como Michigan y Wisconsin durante la noche de las elecciones han generado controversia y desconfianza en el sistema electoral. Los abogados de Trump que desafiaron legalmente los resultados fraudulentos en varios estados han enfrentado cargos, mientras que la defensa de los demócratas parece contar con más respaldo y legitimidad en el sistema judicial.
En resumen, la disputa política en torno a las elecciones de 2020 en Estados Unidos sigue resonando en el panorama actual, con acusaciones de fraude, desconfianza en las instituciones y un clima de polarización que parece no tener un final a la vista. La preparación de Bob Bauer para impugnar los resultados de 2024 es solo un capítulo más en esta saga política que continúa dividiendo al país.