La guerra en Ucrania continúa y las tropas ucranianas se están retirando en todo el frente de 600 millas. No es un buen comienzo de año para Zelensky y el futuro es sombrío en el mejor de los casos. Rusia está destruyendo meticulosamente fábricas ucranianas establecidas para fabricar ropa táctica militar, municiones, drones y vehículos militares. También se han atacado y destruido instalaciones de reparación. Lo mismo para las instalaciones de entrenamiento militar. El reciente uso de municiones en racimo por parte de Ucrania en Belgorod y Donetsk mató a algunos civiles, pero enfureció a Putin y sus comandantes militares. En respuesta, Rusia ha desatado una serie devastadora de ataques con misiles, drones y cohetes en toda Ucrania y ha prometido seguir haciéndolo.
El pánico entre los analistas occidentales sobre la inminente derrota de Ucrania ha aumentado. Robert Clark, escribiendo en el U.K. Telegraph, lamenta en un artículo de opinión titulado «El nuevo año de Ucrania puede terminar con una brutal traición occidental». Clark culpa a los líderes occidentales por el fracaso de Ucrania y afirma que girar la espalda ahora al pueblo ucraniano es moralmente bancarrota y estratégicamente negligente.
Mientras tanto, las economías occidentales están lidiando con la recuperación de la pandemia y el impacto del shock energético del año pasado. Las cadenas de suministro están todavía en flujo, y el Medio Oriente sigue siendo una fuente de tensiones, con un impacto en la economía global.
En cuanto a Clark, ha sido criticado por su análisis del conflicto, en el que califica la situación actual como un estancamiento. Sin embargo, expertos afirman que Rusia está superando a Ucrania y a todos los países de la OTAN en la producción de tanques, proyectiles de artillería y drones, y está aumentando su ejército en 42.000 hombres al mes. Mientras la maquinaria de guerra de Putin avanza, Ucrania no puede ni siquiera desarrollar un plan para reclutar nuevos soldados.
El coronel Jacque Baud, un oficial suizo, autor de un nuevo libro sobre la guerra en Ucrania, es crítico con el manejo del conflicto. Considera que la clave de la superioridad de Rusia está en su enfoque estratégico, en contraste con la visión más fragmentada de Occidente. Su análisis arroja luz sobre los errores que llevan a la derrota de Ucrania y el oeste en este conflicto.
Aunque el Congreso de los Estados Unidos haya decidido aumentar los fondos a Ucrania, el dinero no puede comprar soldados entrenados ni el sistema de defensa aérea necesario para contener el avance ruso. Esto es lo que Jacque Baud entiende y Robert Clark no ve.