La viuda del líder de la oposición rusa Alexei Navalny juró el lunes continuar su lucha contra el Kremlin, mientras las autoridades negaban el acceso a la morgue a su madre, donde se cree que se encuentra su cuerpo después de su muerte la semana pasada en un penal del Ártico.
Con la voz entrecortada en ocasiones en un video publicado en redes sociales, Yulia Navalnaya acusó al presidente ruso Vladimir Putin de matar a su esposo en la remota prisión y alegó que la negativa de las autoridades a entregar el cuerpo a su suegra formaba parte de un encubrimiento.
Las autoridades rusas dijeron que la causa de la muerte de Navalny el viernes a los 47 años aún es desconocida, y es probable que los resultados de cualquier investigación sean cuestionados en el extranjero. Muchos líderes occidentales ya han dicho que responsabilizan a Putin de la muerte.
La muerte de Navalny privó a la oposición rusa de su político más conocido e inspirador, menos de un mes antes de unas elecciones que casi sin duda le darán a Putin otros seis años en el poder. Fue un golpe devastador para muchos rusos, que veían a Navalny como una esperanza rara de cambio político en medio de la implacable represión de Putin contra la oposición.
Navalny había estado encarcelado desde enero de 2021, cuando regresó a Moscú después de recuperarse en Alemania de un envenenamiento con un agente nervioso que él atribuyó al Kremlin. Recibió tres condenas de prisión desde su arresto, por una serie de cargos que rechazó por motivación política.
“Están escondiendo cobardemente y de manera miserable su cuerpo, negándoselo a su madre y mintiendo miserablemente mientras esperan a que desaparezcan las huellas” del veneno, dijo Navalnaya, sugiriendo que su esposo podría haber sido asesinado con un agente nervioso de estilo Novichok.
Instó a los rusos a unirse a ella «para compartir no solo la pena y el dolor interminable que nos ha envuelto y abrazado, sino también mi rabia».
“Lo principal que podemos hacer por Alexei y por nosotros mismos es seguir luchando. … Todos necesitamos unirnos en un puño fuerte y golpear a ese régimen loco”.
El portavoz de Navalny, Kira Yarmysh, dijo que el Comité de Investigación, la principal agencia de investigación criminal del país, informó a Lyudmila Navalnaya que la indagación oficial sobre la muerte se había extendido.
Con la falta de información sobre la muerte después de la breve declaración inicial, muchos rusos especularon sobre lo que le podría haber sucedido a Navalny. Los medios rusos independientes publicaron informes tratando de arrojar luz sobre su muerte. Algunos cuestionaron la narrativa oficial, pero sus informes no fueron posibles de verificar.
En Bruselas el lunes, la viuda de Navalny se reunió con los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea y otros funcionarios. El jefe de política exterior de la UE, Josep Borrell, dijo que el bloque está considerando sanciones contra Rusia y también pidió una investigación internacional independiente sobre las causas de la muerte de Navalny.
Dijo que la responsabilidad de la muerte de Navalny recae en «el propio Putin, pero podemos ir a la estructura institucional del sistema penitenciario en Rusia», para imponer congelaciones de activos y prohibiciones de viaje.
El presidente Joe Biden dijo el lunes que su administración también está considerando imponer sanciones adicionales a Rusia.
El ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, Radek Sikorski, describió a Navalnaya como «muy digna, muy compuesta» y urgió a sus homólogos de la UE a actuar tras la petición de Navalnaya de que el bloque imponga sanciones a más de los partidarios de Putin, más allá de los oligarcas y otros altos funcionarios rusos que ya están siendo objeto de sanciones.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, calificó las acusaciones de los líderes occidentales de «groseras» y «inadmisibles».
«Esas declaraciones no pueden hacer daño al jefe de nuestro estado, pero ciertamente no son adecuadas para quienes las hacen», dijo Peskov en una llamada con periodistas.
Yarmysh dijo que la madre de 69 años de Navalny y sus abogados no se les permitió entrar en la morgue en Salekhard, la capital de la región ártica de Yamalo-Nenets, el lunes por la mañana. El personal no respondió cuando preguntaron si el cuerpo estaba allí, dijo Yarmysh.
Cuando se le preguntó cuándo se le podría entregar el cuerpo de Navalny a su familia, Peskov respondió que el Kremlin no estaba involucrado en esos procedimientos, y agregó que la investigación oficial continuaba en línea con la ley.
Los observadores dijeron que la ley permite a las autoridades mantener el cuerpo durante mucho tiempo si la investigación sigue en curso y bloquear solicitudes de un estudio forense independiente.
El aliado de Navalny Ivan Zhdanov denunció a las autoridades rusas como «lacayos y mentirosos».
«Está claro lo que están haciendo ahora, encubriendo las huellas de su crimen», escribió el lunes.
Desde la muerte de Navalny, casi 400 personas han sido detenidas por la policía en Rusia mientras acudían a monumentos ad-hoc y monumentos a las víctimas de la represión política con flores y velas para rendir homenaje a Navalny, según OVD-Info, un grupo que monitorea las detenciones políticas. Los embajadores de Estados Unidos y Gran Bretaña también lamentaron la muerte de Navalny en un memorial en Moscú.
Las autoridades acordonaron algunos de los memorials en todo el país y estaban retirando flores por la noche, pero seguían apareciendo.
Más de 50,000 personas han presentado solicitudes al gobierno ruso pidiendo que los restos de Navalny sean entregados a sus familiares, dijo OVD-Info.
El Servicio Penitenciario Federal de Rusia informó que Navalny se sintió enfermo después de un paseo el viernes y perdió el conocimiento en el penal donde estaba detenido. Llegó una ambulancia, pero no pudieron revivirlo, dijo el servicio.
Después del último veredicto que le otorgó una condena de 19 años, Navalny dijo que entendía que estaba «cumpliendo una condena de por vida, que se mide por la duración de mi vida o la duración de la vida de este régimen».
En su declaración en video, Navalnaya dijo: «Al matar a Alexei, Putin me mató a mí, la mitad de mi corazón y la mitad de mi alma».
«Pero todavía tengo la otra mitad, y me dice que no tengo derecho a rendirme. Continuaré el trabajo de Alexei Navalny», declaró.
