Con la llegada del verano y las altas temperaturas en todo el país, muchas familias visitarán la playa, el lago o la piscina local. Ahora es momento de repasar los consejos de seguridad para mantener a los niños seguros alrededor del agua.
El ahogamiento es la principal causa de muerte para niños de 1 a 4 años y la segunda causa principal de muerte no intencional para niños de 5 a 14 años, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. En los Estados Unidos, 973 niños menores de 19 años se ahogaron en 2021, y otros 6,500 fueron tratados en salas de emergencias después de incidentes de casi ahogamiento, según Gary Karton de Safe Kids Worldwide, una organización sin fines de lucro dedicada a prevenir lesiones infantiles.
De hecho, más ahogamientos ocurren en verano, y específicamente en julio, que en cualquier otra época del año, según el Children’s Hospital of Pittsburgh.
El guardavidas de Palm Beach County Ocean Rescue, Daniel Barnickel, dice que siempre debería haber un adulto vigilando el agua. «En general, nunca se debe nadar solo», dijo.
Tomarse el tiempo para repasar los procedimientos de seguridad y las reglas antes de ir a la piscina o la playa puede beneficiar a los niños y a sus padres.
Si tienes una piscina en el patio trasero, la característica de seguridad más importante es una barrera, como una cerca de seguridad, para evitar el acceso no supervisado al agua. Muchos niños que se ahogaron en casa lo hicieron en momentos en los que no se esperaba que estuvieran en el agua, según la Cruz Roja Americana. Por lo tanto, es vital asegurarse de que los niños aprendan a nadar.
Si un niño desaparece, recuerda que cada segundo cuenta. Es importante tener el equipo adecuado disponible en casa. Esto incluye algo para lanzar al agua para que un niño pueda agarrarlo, un teléfono móvil para pedir ayuda, chalecos salvavidas y un botiquín de primeros auxilios.
Todos los niños deben aprender a entrar al agua que está por encima de su cabeza y regresar a la superficie de manera segura, flotar o mantenerse a flote, según Safe Kids Worldwide.
Crear un entorno seguro es fundamental. Si varios adultos están en la piscina, la playa o el lago con un grupo de niños, elige a un observador del agua que pueda tener los ojos puestos en los niños en todo momento. Es buena idea rotar al observador del agua entre los adultos durante breves lapsos de tiempo, como intervalos de 15 minutos.
Siempre nada con un compañero o en un área supervisada por un guardavidas. Nunca sobreestimes tus habilidades y haz que los niños jóvenes o inexpertos usen chalecos salvavidas aprobados por la Guardia Costera de Estados Unidos.
En resumen, la seguridad alrededor del agua es fundamental para prevenir tragedias. Mantener a los niños supervisados, enseñarles a nadar, aplicar reglas de seguridad y estar preparados para cualquier emergencia son pasos clave para disfrutar del verano de manera segura y divertida en el agua. ¡No olvides revisar estos consejos y tener un verano sin preocupaciones!