Wesley Chan es conocido por muchos por su característico sombrero de búfalo; sin embargo, puede ser aún más reconocido por su capacidad para detectar «unicornios».
A lo largo de su carrera en capital de riesgo, ha invertido en más de 20 unicornios, incluyendo AngelList, Dialpad, Ring, Rocket Lawyer y Sourcegraph. Cinco de ellos se convirtieron en «decacornios»: Canva, Flexport, Guild Education, Plaid y Robinhood. Chan fue el primero en apostar por la mayoría de ellos.
Después de trabajar en Google en sus primeros días como ingeniero, se convirtió en inversor. Su trayectoria en capital de riesgo comenzó en Google Ventures y continuó en Felicis Ventures. Ahora, como cofundador y socio director de FPV Ventures, lidera el fondo de capital de riesgo de $450 millones de la firma de dos años con la cofundadora Pegah Ebrahimi.
Aunque todo este éxito ha sido bien documentado a lo largo de los años, su viaje personal… no tanto. Chan habló con TechCrunch sobre cómo su vida impacta en cómo invierte en startups.
Su historia comenzó antes de que naciera, cuando su familia emigró a EE.UU. desde Hong Kong en la década de 1970.
“Vinieron aquí sin dinero, y de hecho, creciendo no tenían dinero”, dijo Chan. «Es realmente fascinante ver ese viaje. Que dejaran un lugar donde no hablaban una palabra de inglés y – todavía no hablan muy bien inglés – y construir una nueva vida porque sintieron que era necesario».
Chan admite que no fue tan apreciativo de la fortaleza de sus padres cuando era joven. Sin embargo, crecer en una familia de inmigrantes trabajadores que no tenían mucho dinero terminó enseñándole a reconocer matices y ser alguien que puede adaptarse.
“Estoy en un negocio donde la gente te juzga muy rápido”, dijo Chan. «Entre mis LP, muchos de ellos no tienen el trasfondo que tengo yo. Tengo que recoger todas esas cosas en las que se formaron y ser un poco camaleón. Luego tengo que señalarles que pueden confiar en mí».
El artículo continúa contando cómo Chan, a pesar de tener malas calificaciones en la escuela secundaria, logró ingresar al MIT gracias a un trabajo en un laboratorio de biología. Posteriormente, relata cómo su experiencia de vida, incluyendo momentos de soledad y dificultades, le han enseñado lecciones valiosas que aplica en su carrera como inversor de capital de riesgo.
En resumen, la historia de Wesley Chan es un testimonio de cómo la perseverancia y la lucha pueden llevar a alguien desde humildes comienzos hasta el éxito en el mundo de las inversiones. Su viaje personal, marcado por la adversidad y la determinación, ha moldeado su enfoque como inversor y lo ha llevado a fundar una firma que busca apoyar a emprendedores subrepresentados y promover un cambio positivo en la industria.