El ex presidente Donald Trump ha declarado su apoyo a los vehículos eléctricos después de que Elon Musk, CEO de Tesla, lo «respaldara». Sin embargo, a pesar de esta afirmación, Trump también criticó la infraestructura de los vehículos eléctricos y los mandatos de vehículos eléctricos de Biden.
Por un lado, Musk ha sido durante mucho tiempo un defensor del cambio hacia los vehículos eléctricos. Su empresa, Tesla, ha sido líder en el desarrollo de la industria, lo que lo convirtió por un tiempo en un favorito de la izquierda consciente del medio ambiente.
Sin embargo, en los últimos tiempos, Musk ha abrazado la política conservadora, especialmente la cuestión de la libertad de expresión. Musk compró Twitter en 2022, lo renombró como X y ha eliminado muchas de las restricciones destinadas a limitar el discurso de odio y la desinformación en la plataforma.
A pesar de su apoyo público a Trump, Musk ha negado informes de que prometió una donación de $45 millones a un super PAC proTrump. Por otro lado, Trump ha criticado repetidamente las regulaciones de vehículos eléctricos de la administración Biden, incluido su plan de aumentar las ventas de vehículos eléctricos a la mitad de todas las ventas de vehículos nuevos para 2030.
En cuanto a la infraestructura de carga de vehículos eléctricos, Trump ha planteado críticas al costo de instalación a nivel nacional, dando estimaciones inconsistentes que van desde $5 a $12 billones. Aunque la Ley de Inversión en Infraestructura y Empleos de 2021 incluyó $7.5 mil millones para ayudar a financiar miles de estaciones de carga de vehículos eléctricos en todo el país, el sitio web de seguimiento de infraestructura de la Casa Blanca muestra que solo se han instalado 15 estaciones de carga hasta el momento.
En resumen, la relación entre Elon Musk, Donald Trump y los vehículos eléctricos es compleja y polarizante. Mientras Musk ha apoyado públicamente a Trump y ha sido un impulsor de la tecnología eléctrica, Trump ha planteado críticas a la infraestructura y regulaciones de vehículos eléctricos. La controversia en torno a esta cuestión sigue generando debate y atención en el ámbito político y tecnológico.