Rivian Automotive Inc. detiene sus planes de construir una nueva fábrica multimillonaria en Georgia, una reversión abrupta destinada a reducir costos mientras la empresa se prepara para lanzar un vehículo eléctrico más barato.
La decisión ahorrará al fabricante de automóviles más de $2.25 mil millones en gastos de capital, según informó la empresa en una presentación el jueves. El traslado de la producción planificada del próximo modelo R2 a una instalación existente en Illinois permitirá a Rivian comenzar las entregas en la primera mitad de 2026, antes de lo esperado. El anuncio sorpresa sumerge al destacado proyecto de la fábrica en la incertidumbre, pero el director ejecutivo RJ Scaringe dijo que sigue siendo importante para la compañía.
Las acciones del fabricante de automóviles subieron hasta un 16% después del anuncio, su mayor aumento desde julio. Las acciones ya habían caído más del 50% este año hasta el miércoles debido a las preocupaciones sobre el efectivo de Rivian y la demanda del consumidor por sus productos.
Rivian aseguró en 2022 un paquete de incentivos estatales y locales de $1.5 mil millones, el más grande en la historia de Georgia, para construir la enorme planta a las afueras de Atlanta. En ese momento, la empresa se comprometió a crear 7,500 empleos para fines de 2028, recibiendo elogios de los legisladores locales.
El repliegue se produce dos semanas después de que Rivian anunciara recortes de empleos y dijera que mantendría la producción estancada este año, muy por debajo de las expectativas y desencadenando una fuerte venta de acciones. La empresa ha tenido dificultades para pasar a la producción en masa desde que salió a bolsa en 2021, y los altos precios de sus modelos han sido difíciles de vender a medida que la demanda general de vehículos eléctricos disminuye. Rivian nunca ha obtenido beneficios y perdió más de $40,000 en cada vehículo entregado en los últimos tres meses de 2023.
También el jueves, Scaringe presentó el tan esperado R2, un SUV eléctrico mediano que empezará en alrededor de $45,000. Eso es cerca de $30,000 menos que el SUV existente de Rivian y justo por debajo del precio promedio de venta de un automóvil nuevo en EE. UU. de más de $48,000.
El SUV de dos filas estará disponible en dos tamaños de batería, con la opción más grande que ofrece un alcance de más de 300 millas con una sola carga. Los clientes pueden elegir entre una, dos o tres variantes de motor del SUV. Rivian también está dotando al vehículo de una tecnología autónoma más avanzada con un conjunto de sensores compuesto por 11 cámaras y cinco radares.
Rivian, uno de los pocos fabricantes de vehículos eléctricos dedicados fabricados en América, está tratando de ganar cuota de mercado a Tesla Inc. con el nuevo modelo, el primero dirigido al mercado masivo. El esfuerzo destaca un impulso de los fabricantes de automóviles para reducir costos en un entorno de desaceleración de la demanda de vehículos eléctricos, con fabricantes de Tesla a Ford Motor Co. a la china BYD Co. reduciendo precios.
Scaringe también sorprendió a los inversores con un prototipo de un futuro crossover EV llamado R3. Rivian dijo que este modelo tendría un precio más bajo que el R2, sin dar una cantidad de dinero ni un plazo para su posible construcción.
Actualmente, Rivian fabrica dos vehículos eléctricos para consumidores, la camioneta R1T y el SUV R1S, y una furgoneta comercial principalmente para Amazon.com Inc., su mayor accionista. Todos se construyen en la planta de Normal, Illinois.
