El jugador de los Maroons, Reuben Cotter, se mostró optimista y esperanzado después de la derrota en el segundo partido de la serie State of Origin frente a NSW. A pesar de la decepción por el resultado, Cotter aseguró que él y sus compañeros de equipo están listos para analizar lo sucedido y trabajar en mejorar de cara al partido definitivo.
Después de una actuación que dejó mucho que desear por parte de los Maroons, Cotter se mostró confiado en la capacidad del equipo para reagruparse y darlo todo en el tercer y último partido. «No hemos perdido la confianza … tenemos que ser mejores», afirmó el prop.
Sin embargo, el momento más destacado de la mañana después del partido fue cuando la hija de dos años de Cotter, Sunny, se robó el protagonismo. Cuando le preguntaron si seguía estando orgullosa de su papá, la pequeña respondió con un «sí» tierno pero seguro, demostrando el apoyo incondicional que brinda a su padre.
La historia también juega a favor de los Maroons de cara al partido en el Estadio Suncorp el próximo mes. Los Blues no han ganado un partido decisivo allí en casi 20 años. Recordando la remontada de los Maroons en 2005, queda claro que todo es posible en el rugby league y que la determinación y el trabajo en equipo pueden cambiar el rumbo de un partido.
Con la confianza intacta y el apoyo de sus seres queridos, los Maroons están listos para enfrentar el desafío y luchar por la victoria en el tercer y decisivo encuentro el 17 de julio. Sunny, sin duda, estará allí para animar a su papá en una muestra de amor y respaldo incondicional en la búsqueda del triunfo. ¡Vamos Maroons!