Cameron Smith ha pedido una mayor represión a los jugadores que buscan sacar faltas, con una serie de incidentes absurdos en la ronda 15 descritos como una «pobre imagen» para la NRL.
Con el continuo aporte del Bunker y las preocupaciones sobre los golpes en la cabeza siendo un tema de conversación importante en el rugby league, las faltas por mínimo contacto alto se han vuelto la norma.
Durante el fin de semana, Kyle Flanagan y Kelma Tuilagi se quedaron en el suelo después de ser tocados levemente en la cabeza, ganando cada uno una falta para sus respectivos equipos.
Hablando en la radio SEN el lunes por la mañana, Smith instó a los oficiales del juego a tomar una postura firme y penalizar a los jugadores que se compruebe que buscan sacar faltas.
«Se ha filtrado lentamente en nuestro juego», dijo.
«Si multas a alguien, entonces creo que eso es un poco severo. No me importa penalizar al jugador por intentar simular. No es genial y es una pobre imagen para nuestro deporte.
«Los jugadores buscan cualquier ventaja… si sienten que hay contacto, se quedarán en el suelo absolutamente. Si el Bunker se involucra y determina que no hubo contacto en la cabeza pero el jugador se está sosteniendo la cabeza, ¿por qué no darle a equipo defensivo una falta?
«Los jugadores saben que el bunker echará un vistazo rápido. Introduzcan la regla de HIA donde si te quedas en el suelo y no te levantas, tienes que abandonar el campo.»
A pesar de ganar la falta, la jugada de Flanagan le salió mal contra los Sea Eagles después de ser obligado a salir del campo para una evaluación de lesiones en un momento crucial del juego, el cual los Dragones terminaron perdiendo 30-14 el domingo.
Olakau’atu fue penalizado por la leve falta en la cabeza, pero no fue acusado por el comité de revisión de partidos de la NRL el lunes y estará libre para jugar para los Blues de NSW.
En el caso del back-rower de los Eels, Tuilagi, su astucia solo encendió a los Roosters, quienes vinieron desde atrás para ganar el partido del sábado por la noche.
Tuilagi también fue puesto en observación en el mismo partido por un levantón peligroso sobre Lindsay Collins, con el jugador de Parramatta suspendido por el próximo mes.
En resumen, Cameron Smith está pidiendo una acción más firme contra los jugadores que buscan sacar faltas en el rugby league, argumentando que estas tácticas son una pobre imagen para el deporte y deben ser castigadas adecuadamente para mantener la integridad del juego.