Poderosos oleajes azotaron las playas de la Costa Oeste y Hawái el jueves, a medida que una gran marejada generada por el agitado Océano Pacífico empujaba hacia las costas, causando inundaciones localizadas.
Los pronosticadores instaron a la gente a mantenerse alejada de las rocas y los rompeolas, y a no dar la espalda al océano debido al peligro de «olas irregulares» – olas ocasionalmente mucho más grandes que pueden correr por la arena y arrastrar a alguien fuera de la playa.
Una advertencia de grandes olas para partes del norte de California dijo que las olas oscilarían entre 28 y 33 pies (8.5 a 10 metros) y hasta 40 pies (12 metros) en algunos lugares, dijo el Servicio Meteorológico Nacional, añadiendo que había informes de inundaciones en áreas costeras bajas.
En Aptos, en el extremo norte de la Bahía de Monterey, las olas inundaron la playa y se desbordaron en un estacionamiento, dejando la zona cubierta de escombros. El condado de Santa Cruz emitió advertencias para que la gente en varias zonas costeras estuviera preparada para evacuar.
«La madre naturaleza está enojada», dijo Eve Krammer, una residente de Aptos desde hacía varios años. «Estas olas son peligrosas, son enormes».
La misma zona fue golpeada por el océano en enero pasado, cuando la Costa Oeste fue azotada por numerosos ríos atmosféricos.
«Siento por la gente que está abajo aquí», dijo Jeff Howard, también residente de Aptos.
Aunque no eran tan grandes, las olas a lo largo del sur de California también fueron descritas como peligrosas, con corrientes de resaca mortales. Sin embargo, los surfistas no pudieron resistirse.
La paciencia era clave, según Alex Buford, de 27 años, quien estaba surfeando justo al norte de Manhattan Beach en la costa del condado de Los Ángeles.
«Estuve esperando un rato porque las olas estaban geniales, y fue un poco difícil entrar a pesar de que tengo una tabla muy grande», dijo. «Solo esperé a una buena y la cogí, y fue larga. Bastante grande. Fue genial».
En Hawái, el servicio meteorológico pronosticó que el oleaje subiría a 30 a 40 pies (9 a 12 metros) en las costas que miran al norte y 18 a 22 pies (5.5 a 6.7 metros) en las costas que miran al oeste de cinco islas.
El surfista profesional hawaiano Sheldon Paishon se estaba preparando para surfear el jueves por la mañana en Makaha, una playa de surf de fama mundial en el lado oeste de Oahu.
Paishon, de 30 años, ha estado surfeando en varios lugares alrededor de Oahu esta semana, aprovechando las olas durante la advertencia de oleaje alto en efecto hasta el viernes por la mañana.
«Siempre hay olas grandes en invierno en Hawái», dijo.
Advirtió que los surfistas novatos deberían consultar con los socorristas antes de entrar al agua y «asegurarse de estar rodeados de personas y mantenerse seguros».
Los socorristas de seguridad oceánica de Honolulu, apostados en las playas de Oahu, rescataron a 20 personas a lo largo de la famosa North Shore de la isla el miércoles, dijo la portavoz Shayne Enright. También estuvieron ocupados con miles de «acciones preventivas», dijo.
«Esta época del año produce olas increíbles, pero también puede ser muy peligrosa», dijo.
El peligroso oleaje también podría causar crecidas que podrían golpear propiedades y carreteras costeras, advirtió el servicio meteorológico.
