Nara Smith y Hannah Neeleman han sido llamadas «esposas tradicionales» por los usuarios de redes sociales, lo cual les ha causado incomodidad a ambas. A pesar de las comparaciones, Nara, de 23 años, y su esposo Lucky Blue Smith, recientemente visitaron la granja de los Neeleman, donde Hannah, de 34 años, vive con su esposo Daniel y sus ocho hijos. En una entrevista con The Times of London, Nara afirmó que, a pesar de las similitudes, ella y Hannah son bastante diferentes y rechazan ser etiquetadas como «esposas tradicionales».
Ambas mujeres documentan sus vidas domésticas en las redes sociales, lo que ha llevado a críticas y a ser llamadas «esposas tradicionales». Sin embargo, Nara y Hannah han dejado claro que comparten responsabilidades con sus respectivas parejas. Nara enfatizó que no es una «esposa tradicional», sino una madre trabajadora que ha encontrado un equilibrio entre su carrera y su vida familiar.
Nara y Lucky, quienes se casaron en 2020, comparten la responsabilidad de las tareas del hogar de manera equitativa. A pesar de las críticas por ser madre joven, Nara defiende su decisión de tener hijos a una edad temprana, siguiendo el deseo de criar a sus hijos junto a su esposo. A pesar de las críticas, Nara ha encontrado la plenitud en su rol como madre y esposa, rechazando la idea de seguir teniendo más hijos para poder enfocarse en ser la mejor madre posible.
En resumen, Nara Smith desafía las expectativas tradicionales de género y maternidad, demostrando que cada pareja tiene su propia forma de compartir responsabilidades y criar a sus hijos. Su determinación y ambición la guían a buscar un equilibrio entre su carrera y su familia, priorizando siempre el bienestar de sus hijos.