La advertencia contrasta con la de sus rivales LVMH y Hermès, cuyas ventas han permanecido resilientes.
El mercado de lujo ha crecido en la última década, pero las ventas no han sido tan impresionantes en los últimos años.
Se estima que Gucci obtiene más de un tercio de sus ventas de China, cuya economía ha estado en dificultades.
Kering dijo en un comunicado que la advertencia de beneficios «refleja una caída más pronunciada en las ventas de Gucci, especialmente en la región de Asia-Pacífico». La firma tiene previsto presentar sus resultados financieros el 23 de abril.
Gucci representó dos tercios del beneficio operativo del grupo el año pasado. Otras marcas de Kering incluyen Yves Saint Laurent, Balenciaga y Bottega Veneta.
El mes pasado, Kering informó que su beneficio neto el año pasado cayó un 17%. Sus acciones han caído más de un 23% en el último año.
En comparación, su rival más grande, LVMH, que posee Louis Vuitton, Moët & Chandon y Hennessy, registró ventas superiores a lo esperado para 2023.
Hermes también celebró sus ventas anuales récord el año pasado con planes de recompensar a todos los empleados en todo el mundo con un bono.
Si bien sus resultados mostraron resistencia en el mercado de lujo, Gucci se sabe que apunta a compradores más jóvenes y aspiracionales que son más vulnerables a las presiones económicas.
El año pasado, Kering cambió la alta dirección de Gucci al nombrar a Jean-François Palus como director ejecutivo y a Sabato De Sarno como director creativo.
Los primeros artículos de su colección Ancora estuvieron disponibles a mediados de febrero.
La colección ha sido recibida con «una recepción muy favorable», según el comunicado de Kering.
