El Reino Unido ha anunciado sus regulaciones auto proclamadas como «líderes mundiales» para los coches autónomos, que ahora son oficiales después de que el Acta de Vehículos Automatizados (AV) recibiera el asentimiento real, el último sello de aprobación que cualquier legislación debe pasar antes de ser consagrada en ley. El gobierno afirma que los vehículos totalmente autónomos podrían circular por las carreteras del Reino Unido en un plazo de dos años.
«Hoy en día, nuestras históricas leyes significan que los vehículos autónomos pueden ser desplegados en las carreteras británicas tan pronto como 2026, lo que supone un impulso real tanto para la seguridad como para nuestra economía», dijo el Secretario de Transporte Mark Harper en un comunicado.
Esta noticia llega pocas semanas después de que la empresa con sede en el Reino Unido, Wayve, recaudara más de mil millones de dólares de empresas de renombre como SoftBank, Nvidia y Microsoft para seguir desarrollando un sistema de software de autoaprendizaje para vehículos autónomos.
Al igual que otros países, el Reino Unido ha permitido coches autónomos en las carreteras públicas desde hace muchos años, pero con estrictas normas para las empresas que buscan permiso para probar nuevas tecnologías. Sin embargo, a medida que la industria de vehículos autónomos ha evolucionado y se ha preparado para la hora pico, la necesidad de un nuevo marco legal se hizo evidente.
La responsabilidad es uno de los aspectos fundamentales de la nueva regulación del Reino Unido: ¿quién será responsable en caso de un accidente? El Reino Unido aclaró este punto en 2022 cuando publicó un plan de acción que establece que su nueva legislación hará que las corporaciones sean responsables de cualquier percance.
Cada vehículo autónomo aprobado tendrá una «Entidad de Conducción Autónoma Autorizada» correspondiente, que en la mayoría de los casos será el fabricante, pero en realidad podría ser el desarrollador de software o la compañía de seguros. Y esta entidad será la responsable del vehículo cuando el modo de conducción autónoma esté activado.
El Gobierno establecerá un sistema de aprobación de vehículos respaldado por una «función de investigación de incidentes completamente independiente», y se espera que las empresas aprobadas para operar bajo las nuevas regulaciones cumplan con «obligaciones continuas» para garantizar que sus vehículos sean seguros.