La protección de los animales es algo bueno, no hay duda al respecto, pero debemos proteger principalmente a los seres humanos.
En muchos casos, el deseo de hacer el bien por algunas especies peligrosas está llevando a un aumento catastrófico en sus números, lo que provoca una situación mucho más peligrosa para la población humana.
Ese parece ser el caso en el norte de Australia, donde el incremento de la población de cocodrilos se está convirtiendo en un problema mortal.
Después de que una niña de 12 años fuera asesinada mientras nadaba, el líder del territorio ha pedido que los números de cocodrilos se ‘mantengan o reduzcan’ y ha afirmado que ‘no se les puede permitir superar a la población humana’.
Según la Agencia Associated Press, la población de cocodrilos ha experimentado un explosivo crecimiento a lo largo del norte tropical de Australia desde que se convirtió en una especie protegida por la ley australiana en la década de 1970, pasando de 3,000 cuando la caza se prohibió a 100,000 en la actualidad. El Territorio del Norte tiene poco más de 250,000 habitantes.
La muerte de la niña ocurrió semanas después de que el territorio aprobara un plan de 10 años para la gestión de los cocodrilos, que permite la caza dirigida de los reptiles en lugares populares para nadar, pero no llega a un retorno a las cacerías masivas. Los cocodrilos se consideran un riesgo en la mayoría de los cursos de agua del Territorio del Norte, pero el turismo y la cría de cocodrilos son importantes impulsores económicos.
«Hemos visto que la población de cocodrilos supere a la población humana en el Territorio del Norte», declaró la Ministra Principal Eva Lawler a los reporteros según la Corporación de Radiodifusión Australiana. «Necesitamos mantener bajo control nuestros números de cocodrilos».
Una niña de doce años desapareció mientras nadaba en un arroyo en Palumpa, al suroeste de Darwin. Sus restos fueron encontrados más tarde en el río donde desapareció, y las horribles lesiones confirmaron un ataque de cocodrilo.
Los cocodrilos de agua salada pueden vivir hasta 70 años, alcanzando hasta 23 pies de longitud, y al parecer la proporción de cocodrilos grandes también está aumentando. Se han asignado 337,000 dólares en el presupuesto del Territorio del Norte para ‘gestión’ de cocodrilos en el próximo año.
Incluso la oposición se está movilizando, no en contra de los titulares, sino en contra de los cocodrilos, pidiendo más dinero para la eliminación de las poblaciones de estos reptiles. Ahora están tratando de atrapar al cocodrilo de agua salada que atacó a la niña, ya que son territoriales y es probable que permanezcan en cursos de agua cercanos.
En resumen, es importante proteger tanto a los animales como a los humanos, pero en situaciones donde la población de ciertas especies peligrosas está aumentando de manera descontrolada, es necesario tomar medidas para garantizar la seguridad de las personas. La gestión adecuada de la población de cocodrilos en el norte de Australia es crucial para evitar futuras tragedias.