Elon Musk, el CEO de X y varias otras compañías con la letra “X” en sus nombres, se encuentra en la mira de los reguladores después de saltarse el testimonio este mes en una investigación relacionada con la adquisición de Twitter por parte de Musk.
En una presentación hoy, la Comisión de Valores y Bolsa de los Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) dijo que tenía la intención de buscar sanciones contra Musk después de que este no se presentara a una comparecencia ordenada por la corte en un tribunal de Los Ángeles el 10 de septiembre. Según la presentación, Musk no notificó a la SEC que no iba a comparecer hasta tres horas antes de que comenzara su testimonio.
«El Tribunal debe dejar claro que los juegos y tácticas dilatorias de Musk deben cesar», reza la presentación.
En lugar de comparecer el 10 de septiembre, Musk pasó supervisando el lanzamiento de Polaris Dawn, una nave espacial fabricada por su empresa de exploración espacial, SpaceX, según la presentación.
El abogado de la SEC ofreció reprogramar la audiencia de Musk para al día siguiente, el 11 de septiembre. Pero el abogado de Musk declinó, acordando únicamente fechas de comparecencia en octubre.
La SEC está buscando un «alivio condicional significativo» si Musk no comparece en el tribunal en octubre. La agencia también señaló que planea presentar una moción de sanciones contra Musk para recuperar los costos de viaje por el testimonio cancelado y otros alivios. (En la presentación, la SEC dijo que gastó «miles de dólares» para volar a tres abogados a Los Ángeles para la audiencia del 10 de septiembre).
La comparecencia ordenada por el tribunal de Musk se deriva de la investigación de la SEC que busca determinar si el multimillonario cumplió con la ley al revelar sus compras de acciones de Twitter antes de adquirir la compañía por $44 mil millones en 2022. La investigación también busca determinar si las declaraciones de Musk sobre el acuerdo fueron engañosas; la SEC alega que Musk esperó al menos 10 días demasiado tarde para revelar que estaba comprando acciones de Twitter.
La investigación es la segunda vez que Musk ha estado bajo la mira de la SEC en los últimos años. En 2018, la agencia ordenó a Musk que renunciara como presidente de Tesla y pagara $40 millones en multas por tweets relacionados con las acciones de Tesla que la SEC encontró manipuladores del mercado. En ese momento, Musk calificó los cargos de fraude como una «acción injustificada».
La SEC también ha investigado a Musk y a Tesla por afirmaciones sobre las capacidades de «total autoconducción» de los vehículos de Tesla, así como por el uso de fondos de la empresa para construir a Musk una «casa de vidrio».