El portero estrella de Argentina, Emiliano «Dibu» Martínez, se ha visto envuelto en una polémica después de supuestamente haber abofeteado a un camarógrafo tras la derrota de Argentina 2-1 contra Colombia en un partido crucial de las eliminatorias del Mundial. El incidente ocurrió el martes en Barranquilla, generando reacciones mixtas entre los fanáticos y los medios de comunicación en toda América del Sur.
El camarógrafo, Jhonny Jackson, que trabaja para empresas que proporcionan imágenes a Caracol Televisión y RCN Deportes, se acercó a Martínez al final del partido. Mientras filmaba las secuelas de un encuentro intenso, capturó un momento que se volvería viral. En el video se ve al portero, ganador del Mundial, golpeando la cámara mientras saludaba a otro jugador en el campo, lo que hizo que la cámara se tambaleara y cayera al suelo.
“De la nada, me abofeteó”, comentó Jackson a RCN Deportes. “Yo estaba trabajando, al igual que él. Él estaba jugando y yo grabando el partido con mi cámara. Su reacción me sorprendió y me enfureció”.
A pesar del incidente, Jackson dirigió posteriormente un mensaje directo a Martínez, adoptando un tono más conciliador. “Dibu, hermano, ¿cómo estás? Soy el camarógrafo al que golpeaste durante el partido contra Colombia. Solo quiero decirte que está todo bien. Todos han perdido un partido en su vida, y está claro que esta derrota te afectó mucho. Pero mira hacia adelante, Dibu”, expresó Jackson en un video.
Aunque Jackson minimizó el incidente, la Asociación Colombiana de Periodistas Deportivos (ACORD) ha tomado una postura más firme. La organización está pidiendo a la FIFA que emita una sanción estricta contra Martínez por sus acciones. Faiver Hoyos Hernández, presidente de ACORD, afirmó en una solicitud formal que el comportamiento del portero socava la libertad de prensa y no debe ser pasado por alto.
“Como autoridad periodística en este país, ACORD exige que la FIFA imponga una sanción ejemplar a Emiliano ‘Dibu’ Martínez, quien con sus acciones no sirve como modelo para las nuevas generaciones”, declaró Hoyos Hernández en el comunicado.
Hasta el momento, ni Martínez ni el organismo rector del fútbol sudamericano, la CONMEBOL, han emitido comentarios oficiales sobre el incidente. Argentina, que sigue liderando la tabla de las eliminatorias sudamericanas con 18 puntos, enfrenta una creciente presión, especialmente con solo dos partidos de clasificación restantes.
La polémica surge en un momento crítico para el equipo, ya que busca asegurar un lugar automático en el Mundial 2026. Los seis mejores equipos de la región se clasificarán, y aunque Argentina sigue liderando, las tensiones son claramente altas tanto dentro como fuera del campo.
Este incidente plantea preocupaciones sobre la conducta de los jugadores y el trato hacia el personal de los medios, particularmente en partidos de alta tensión donde las emociones están al máximo. Todos los ojos están puestos en la FIFA y la CONMEBOL para ver cómo responden a este altercado y si Martínez enfrentará sanciones disciplinarias por su arrebato.