Firefly Aerospace envió su cohete Alpha al espacio esta mañana, con la compañía transportando una carga de Lockheed Martin al espacio. Sin embargo, la compañía aún no ha actualizado al público sobre si desplegó con éxito el satélite en su órbita de destino, lo que podría sugerir un problema con la segunda etapa del cohete.
El lanzamiento de hoy marca el cuarto vuelo de la historia del cohete Alpha de Firefly. El vehículo despegó desde la Base Espacial de Vandenberg en California a las 9:32 AM hora local. La misión, llamada «Fly the Lightning», fue un lanzamiento comercial para el cliente Lockheed Martin. El cohete llevaba la carga de demostración de Lockheed, llamada demostrador de tecnología de Antena Electrónicamente Orientable (ESA), a la órbita terrestre baja.
A eso de las 9:40 am hora local, Firefly tuiteó que volvería a encender el motor de la segunda etapa de Alpha para circularizar su órbita en unos 40 minutos. A partir de ahí, la carga útil de Lockheed Martin debería haber sido desplegada. Pero la compañía aún no ha proporcionado una actualización cuatro horas después.
ESA es un tipo de matriz de antena que puede ser electrónicamente orientada. Lockheed dice que su diseño exclusivo permitirá a la compañía calibrar el nuevo sensor ESA en una fracción del tiempo en comparación con los sensores tradicionales en órbita, que pueden tardar meses en encenderse y estar listos para operar. La carga útil de demostración de ESA de la compañía fue integrada en un bus satelital construido por Terran Orbital (Lockheed posee casi el 7% de las acciones en circulación de Terran).
Si bien el objetivo principal de la misión es desplegar la carga útil, Firefly dijo que su equipo de misión también está rastreando las horas totales de trabajo desde que recibieron la carga útil hasta la preparación para el lanzamiento, para continuar demostrando a la Fuerza Espacial que es capaz de proporcionar capacidades de lanzamiento rápido.
El lanzamiento rápido es una de las prioridades para la Fuerza Espacial; Firefly ya lo demostró una vez durante la última misión de Alpha que estableció un nuevo récord para la preparación para el lanzamiento. Para esa misión, Firefly tuvo solo 24 horas para completar los preparativos finales para el lanzamiento, encapsular la carga útil y unirla al cohete.