Después de haber presentado una demanda civil astronómica de $50 mil millones contra el magnate del rap Sean ‘Diddy’ Combs por tráfico sexual, la ex actriz porno Adria English presentó una denuncia criminal contra él en el Departamento de Policía de Miami Beach.
También figuran como acusados en la demanda Jacob Arabov, conocido como ‘Jacob the Jeweler’, una mujer llamada Tamiko Thomas y la empresa de entretenimiento de Diddy, Bad Boy.
English también espera presentar una denuncia penal adicional en Nueva York.
El Daily Mail informó:
«En su demanda original, English alega que trabajó en fiestas organizadas por Diddy en las que bebería alcohol mezclado con narcóticos como éxtasis y le pedirían que coqueteara con los invitados.»
English afirma que tuvo ‘relaciones sexuales forzadas’ con Arabov y pagó un extra de $1,000 en comparación con la tarifa habitual por trabajar en las fiestas.
Diddy es acusado de obligarla a consumir grandes cantidades de alcohol presuntamente drogado.
«English mencionó a [Tamiko] Thomas en la demanda y la comparó con Ghislaine Maxwell y a Diddy con Jeffrey Epstein. Sin el acusado Thomas, una mujer que utiliza su buena voluntad inherente como mujer para ganarse la confianza de otra mujer, coordinando y actuando como un avatar para el acusado Combs, el acusado Combs no podría ejecutar su organización corrupta de tráfico sexual.»
Ella afirma que él prometió ayudar a avanzar en su carrera ayudándola a unirse a un grupo de chicas.
«A pesar de verse obligada a beber grandes cantidades de alcohol y consumir drogas ilícitas, las experiencias que la demandante fue obligada a soportar fueron tan dolorosas que la demandante las recuerda ya que todavía la persiguen hasta el día de hoy,» dice la demanda.
«La demandante cumplió con las expectativas del acusado Combs, fue personalmente agradecida por su obediencia por el acusado Combs y posteriormente fue invitada a futuros empleos en las ‘Fiestas Blancas.»
«El haber sido traficada y abusada sexualmente ha llevado a la demandante a un torbellino de ansiedad y depresión,» continúa el documento judicial.
El abogado de Combs, Jonathan Davis, sostiene que las acusaciones son falsas. «Vivimos en un mundo donde cualquiera puede presentar una demanda por cualquier motivo y sin ninguna prueba.»