El Apple iPad Air (2024) es un dispositivo excepcional, y trabajar en él me resulta tan cómodo y rápido como hacerlo en mi MacBook Air M1. Sin embargo, he dudado en recomendarlo como una alternativa real a un portátil debido al elevado precio del accesorio Magic Keyboard. Cuesta 300 euros para la versión de 11 pulgadas y 350 euros para la de 12,9 pulgadas. Por eso, me propuse encontrar una forma de reducir el costo sin sacrificar mi productividad.
Me propuse hacer precisamente eso, y en el proceso, convertí mi iPad Air en una excelente máquina de trabajo, todo por solo 90 euros. Aquí te cuento cómo lo logré.
El Magic Keyboard de Apple es brillante
Antes de entrar en detalles, debo decir que si el dinero no es un problema, el Magic Keyboard es una compra brillante. Todavía tengo el que compré para mi iPad Pro (2020), y afortunadamente, Apple no ha cambiado el diseño, por lo que también se ajusta al último iPad Air. Utilicé el iPad Pro y el Magic Keyboard en lugar de un portátil durante un par de años, y funcionó de maravilla. La experiencia de escritura es prácticamente perfecta, y debido a la base sólida, puedes apoyarlo en tu regazo en lugar de depender únicamente de un escritorio, como un verdadero portátil.
En los cuatro años que he tenido el Magic Keyboard, solo ha sufrido un problema. La tecla Shift derecha se soltó de sus anclajes y ahora se mueve de manera molesta. Aún funciona, pero puedo ver dónde se ha roto una de las diminutas pestañas de fijación. No sé cómo ocurrió; aparte de eso, el teclado está en sorprendentemente buen estado, dado el tiempo que ha pasado dentro y fuera de bolsos en diferentes lugares durante estos años.
Esto significa que considero el Magic Keyboard una buena inversión, siempre y cuando lo vayas a utilizar mucho. El problema surge cuando solo lo vas a usar ocasionalmente, y no quieres depender únicamente del teclado en pantalla, ya que agrega un costo considerable al precio del iPad Air. He encontrado una opción más económica que compromete un poco la comodidad, pero que aumenta la versatilidad y te permite trabajar de manera rápida y eficiente en la tableta, y todo por solo 90 euros. Sí, 90 euros, y eso incluye un estuche y un teclado.
Un teclado fantástico por solo 40 euros
El teclado es el accesorio más importante, y he encontrado uno excelente. Soy fan de los teclados de Keychron desde hace tiempo, y considero que el antiguo Keychron K3 es un gran compañero para el Apple iPad. Sin embargo, el Keychron B1 Pro es una mejor opción para este caso. Este increíble teclado ultradelgado con teclas tipo chiclet es perfecto para el uso móvil, ya que es muy ligero —solo 425 gramos— y su tamaño es apenas mayor que el del iPad. Lo he llevado en mi bolso sin sentir en ningún momento que llevo un teclado.
Se conecta al iPad Air mediante Bluetooth, y puedes vincularlo hasta con tres dispositivos diferentes y cambiar entre ellos fácilmente, lo que lo convierte en un compañero versátil. Lo he sincronizado con mi Mac Mini M1 y lo he usado en casa antes de cambiarlo a mi iPad Air cuando salgo de casa. La conexión Bluetooth ha sido impecable. Solo toma unos momentos configurarlo y se reconecta automáticamente. No he tenido que cargar la batería desde que llegó hace unos meses, a pesar de usarlo varias horas diarias.
Todos los artículos que he escrito desde abril los he tecleado usando el Keychron B1 Pro, ya sea vinculado a mi iPad o a mi Mac Mini, y lo he encontrado cómodo y preciso. El cuerpo de plástico puede hacer que se sienta un poco barato (porque lo es) en comparación con mi teclado Logitec MX Keys Mini, pero nunca me ha desanimado usarlo. No tiene retroiluminación, lo que puede frustrar a algunos, pero las teclas son de tamaño completo, es totalmente personalizable con el software de Keychron para macros y atajos, y funciona con Mac OS, Windows y Linux. Además, viene con un dongle receptor de Bluetooth por si lo necesitas. Por 40 euros, es una auténtica ganga.
¿Y el estuche?
Mencioné antes que la conveniencia tiene un pequeño compromiso. Aunque el Keychron B1 Pro es una compra multifuncional (puede usarse con otros dispositivos, a diferencia del Magic Keyboard), no está unido al iPad, por lo que necesitas algún tipo de estuche. Hay docenas, si no cientos, de estuches tipo folio que mantienen el iPad en posición vertical frente a ti, pero yo he estado usando el estuche Zagg Crystal Palace, que cuesta 50 euros para la versión de 11 pulgadas o 60 euros para la de 12,9 pulgadas.
Lo elegí porque me gusta la parte trasera transparente, que deja ver el color del iPad. También tiene un soporte incorporado para el Apple Pencil si tienes uno. Esto aumenta la comodidad, compensando el hecho de que el teclado no esté unido a la tableta. No es muy pesado, está bien hecho y la cubierta frontal plegable magnética nunca se ha desplomado. Encuentro el ángulo un poco extremo para algunas situaciones, y por supuesto, la combinación del estuche Crystal Palace y el Keychron B1 Pro no se puede usar en tu regazo. La ventaja es que el par cuesta solo 90 euros en comparación con los 300 euros.
El teclado B1 Pro es sorprendentemente delgado con 14 mm, pero es bastante grueso cuando se sostiene junto con el iPad Air. Sin embargo, su bajo peso significa que el paquete completo con el estuche Zagg pesa 1,1 kg. El iPad Air con el Magic Keyboard pesa 1,04 kg, por lo que no hay mucha diferencia. Sí, es un compromiso, pero si no lo vas a usar constantemente, esta puede ser una sacrificio que estés dispuesto a hacer cuando hay ahorros de costos tan significativos.
Una combinación ganadora
He usado esta combinación durante unos meses, y aparte de no poder usarla en mi regazo de vez en cuando y tener que llevar un teclado separado, convierte el iPad en una sorprendente máquina de trabajo. Podrías encontrar un estuche mucho más barato que el Zagg Crystal Palace si quisieras reducir aún más los costos, pero no creo que debas pasar por alto el Keychron B1 Pro en la búsqueda de una alternativa al Magic Keyboard. La experiencia de escritura es soberbia para su precio.
Mis necesidades laborales son bastante simples, y el iPad Air (2024) tiene más que suficiente rendimiento y duración de batería para satisfacerlas, pero no puedo usar el teclado en pantalla para nada más que lo básico. El Magic Keyboard es un gran producto, pero es un lujo, y rara vez lo he echado de menos usando estos dos productos que puedes obtener por menos de un tercio de su precio.