Los fabricantes de automóviles japoneses Nissan y Honda han anunciado planes para compartir componentes para vehículos eléctricos, como baterías, y para investigar de manera conjunta el software para la conducción autónoma.
Esta alianza ha sido fortalecida con la incorporación de Mitsubishi Motors Corp., sumándose a la visión de que la rapidez y el tamaño son cruciales para responder a los cambios dramáticos en la industria automotriz centrados en la electrificación.
Después de 100 días de conversaciones, los ejecutivos de las compañías demostraron un sentido de urgencia. A pesar de que los fabricantes de automóviles japoneses dominaron la era de los motores a gasolina en las últimas décadas, han quedado rezagados ante nuevos y fuertes competidores en el mercado de los vehículos verdes, como Tesla de Estados Unidos y BYD de China.
«Las compañías que no se adaptan a los cambios no pueden sobrevivir», dijo el director ejecutivo de Honda, Toshihiro Mib. «Si intentamos hacerlo todo por nuestra cuenta, no podremos ponernos al día».
Nissan y Honda utilizarán las mismas baterías y adoptarán las mismas especificaciones para los motores y convertidores de inversores para los ejes de vehículos eléctricos, según anunciaron.
Esta alianza estratégica permitirá a las compañías realizar inversiones más rentables en tecnología y reducir costos al aumentar el volumen de producción. Cada empresa seguirá produciendo y ofreciendo sus propios modelos, pero compartirán recursos en áreas como el desarrollo de componentes y software.
Aunque no revelaron si la amistad entre las compañías se extenderá a una propiedad de capital mutua, destacaron que no está descartado.
Además, las compañías acordaron complementar mutuamente sus líneas de modelos en diversos mercados globales, incluidos los vehículos de motor de combustión interna y los vehículos eléctricos. Honda y Nissan también colaborarán en servicios energéticos en Japón, con la incorporación de Mitsubishi como tercer miembro.
Toyota Motor Corp., el principal fabricante de automóviles de Japón, no forma parte de esta colaboración. A pesar de las diferentes culturas corporativas de Honda y Nissan, quedó claro que, a medida que continuaban las discusiones sobre trabajar juntos, sus ingenieros y otros trabajadores en el terreno compartían muchos puntos en común.
«La rapidez es el elemento más crucial, considerando nuestro tamaño», agregó Uchida. Los directivos reiteraron que, al unirse, demostrarán que uno más uno sumará más de dos.
En resumen, la alianza entre Nissan y Honda, con la incorporación de Mitsubishi, representa un paso importante para la industria automotriz japonesa en la carrera hacia la electrificación y la conducción autónoma. Esta colaboración permite a las compañías competir de manera más eficiente y mantenerse relevantes en un mercado en constante evolución.