El CEO de una startup de hardware noruega compartió conmigo un pitch deck que incluía una diapositiva inusual: la tabla de capitalización de la empresa, que desglosaba quién poseía qué parte de la empresa. Por lo general, las tablas de capitalización se comparten en la fase de diligencia de inversión.
Al analizar la tabla, surgió un problema significativo: la empresa ha cedido más de dos tercios de su capital para recaudar $3.3 millones. Con la empresa iniciando una ronda de financiación de $5 millones, esto representa un serio obstáculo.
TechCrunch habló con varios inversores de Silicon Valley, planteando el hipotético escenario de si invertirían en un fundador que presentara una tabla de capitalización con dinámicas similares a la mostrada anteriormente. Descubrimos que la tabla de capitalización tal como está hoy en día hace esencialmente que la empresa sea ininvertible, pero que aún hay esperanza.
El problema radica en que los inversores poseen el doble de la empresa que los tres fundadores juntos. Esto plantea un obstáculo para los fundadores, ya que ven reducida su participación y sus incentivos a largo plazo, lo que puede limitar el crecimiento potencial de la startup.
Limpiar una tabla de capitalización como esta no es tarea fácil, pero es fundamental para atraer nuevos inversores y alinear los incentivos de la empresa. En este caso, se requiere una reestructuración en la cual los fundadores recuperen su participación en la empresa y se corrijan las anomalías presentes.
La clave para resolver esta situación radica en encontrar un nuevo líder que pueda ayudar a sanear la tabla de capitalización y devolver la propiedad a los fundadores. Este proceso conlleva riesgos y requiere tiempo, energía, dinero y abogados. Sin embargo, si se logra corregir la tabla, la empresa tendrá una mejor posición para atraer inversiones y crecer de manera sostenible.
En resumen, es crucial que las startups mantengan una tabla de capitalización equilibrada, donde los inversores posean una minoría de la empresa en total, los fundadores mantengan una participación saludable y el equipo y la empresa común tengan el resto de las acciones. Esta estructura garantiza la alineación de intereses y brinda a los fundadores el reconocimiento y el incentivo necesario para construir una startup exitosa a largo plazo.