El Primer Ministro de Eslovaquia, Robert Fico, está vivo y en plena forma. Hace aproximadamente veinte días, un hombre de izquierda y pro-ucraniano lo disparó mientras se acercaba a los ciudadanos reunidos en barricadas y extendía la mano para saludarlos. El hombre, el ‘poeta’ Juraj Cintula, avanzó, extendió su brazo y disparó cinco rondas, cuatro de las cuales alcanzaron al Primer Ministro, antes de ser reducido y arrestado. En un estado crítico, Fico fue sometido a una cirugía de cinco horas, seguida de otra cirugía de dos horas dos días después. Sin embargo, el líder populista en recuperación afirma sin ambigüedad que cree haber sido «atacado por tener una posición sobre Ucrania contraria a la corriente europea».
En un video que Fico publicó en línea, se le vio por primera vez desde el intento de asesinato. Este hecho ocurrió tan solo unos días antes de las elecciones para el Parlamento Europeo en Eslovaquia. La agencia Associated Press informó: «Aparentemente en buena forma mientras hablaba, Fico se comprometió a volver al trabajo en aproximadamente un mes y dijo que no sentía ‘ningún odio’ hacia su agresor y no planeaba tomar medidas legales contra él. ‘Lo perdono’, dijo durante su discurso de 14 minutos». A pesar de esto, criticó a la oposición y a otros, afirmando: «Después de todo, es evidente que solo era un mensajero del mal y del odio político». Fico asegura que sus opiniones tan distintas sobre la guerra rusa en Ucrania lo convirtieron en un objetivo.
Fico detuvo la ayuda militar para Ucrania, se opone a las sanciones de la Unión Europea contra Rusia y quiere bloquear a Ucrania para que no se una a la OTAN. «Es cruel afirmar esto, pero el derecho a tener una opinión diferente ha dejado de existir en la Unión Europea», dice, culpando a países occidentales no especificados por la situación. Fico fue dado de alta del hospital la semana pasada y trasladado a su hogar en Bratislava, donde se está recuperando. El tribunal penal especial de Eslovaquia ordenó que el sospechoso, acusado de intento de asesinato, permaneciera tras las rejas. Funcionarios del gobierno originalmente creían que se trataba de un ataque con motivaciones políticas perpetrado por un «lobo solitario», pero luego anunciaron que podría haber existido una «tercera parte» involucrada, «actuando en beneficio del agresor».
Fico dijo el miércoles que «no tenía motivos para creer» que se tratara de un ataque de una persona desequilibrada y solitaria. Su partido de izquierda-populista, Smer (Dirección), está en una carrera reñida para ganar las elecciones al Parlamento Europeo, contra la oposición de Progresista Eslovaquia, un partido liberal pro-occidental. A pesar de este terrible incidente, Fico se mantiene firme en sus convicciones y continúa avanzando en su carrera política con valentía y determinación. Su voluntad de perdonar a su agresor es un ejemplo de nobleza y empatía en un mundo lleno de conflictos y divisiones. La recuperación de Fico es un testimonio de su fuerza física y su determinación inquebrantable. La democracia eslovaca seguirá adelante, guiada por un líder que no se rinde ante la adversidad. ¡Fuerza, Robert Fico! ¡Que tu valentía y determinación sigan inspirando a todos nuestros corazones!