Donald Trump regresó al tribunal de Nueva York el martes para los argumentos finales de su juicio, el acto final antes de que los doce jurados se retiren para decidir sobre un veredicto histórico, en medio de la campaña presidencial.
A su llegada, el ex presidente de los Estados Unidos declaró que era un «día peligroso para América,» criticando una vez más «un juicio que no debería haber tenido lugar» y atacando al juez que lo preside, Juan Merchan, calificándolo de «corrupto.»
Después de seis semanas de intensos debates, la defensa y la acusación tienen una última oportunidad de convencer al jurado, siete hombres y cinco mujeres encargados de decidir este caso con enormes implicaciones políticas para el candidato republicano en las elecciones del 5 de noviembre.
La acusación enfatizará que el 45º presidente de los Estados Unidos (2017-2021) efectivamente cometió falsificaciones de documentos contables en su grupo de empresas, la Trump Organization, para ocultar un pago de $130,000 a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels para evitar un escándalo sexual al final de su campaña presidencial de 2016.
Los fiscales insistirán en que a través de este pago, que equiparan a un gasto de campaña oculto, Donald Trump «corrompió» las elecciones comprando el silencio de la actriz sobre una relación sexual que ella afirma haber tenido con él en 2006, mientras él ya estaba casado con su esposa Melania.
Donald Trump, quien ganó la elección por un estrecho margen frente a Hillary Clinton, niega esta relación y se presenta como una víctima de persecución política. Ha renunciado a testificar en el juicio.
Sembrar Dudas
La defensa, por otro lado, intentará una vez más torpedear la credibilidad del principal acusador, el antiguo hombre de confianza de Donald Trump, Michael Cohen, para sembrar dudas en el jurado, que debe ser unánime para declarar culpable al acusado.
Michael Cohen había pagado el dinero, por orden de su jefe, a Stormy Daniels «para asegurarse de que la historia no saliera y no afectara las posibilidades de Donald Trump de convertirse en Presidente de los Estados Unidos,» aseguró. Luego fue reembolsado utilizando, según la acusación, facturas falsas y entradas disfrazadas como «honorarios legales» en las cuentas de la Trump Organization, de ahí los cargos de falsificaciones contables.
Después de los argumentos finales, el juez Juan Merchan confiará a los jurados, tal vez tan pronto como el miércoles, la pesada tarea de decidir si encuentran al ex jefe de estado estadounidense culpable o no culpable.
Si no logran ponerse de acuerdo, el juicio tendrá que repetirse.
Codo a Codo
Si es declarado culpable, el candidato republicano a la presidencia, de 77 años, puede apelar y, en cualquier caso, presentarse el 5 de noviembre. Pero con el considerable peso de una condena penal, mientras su duelo con Joe Biden, de 81 años, promete ser ajustado.
El riesgo es aún mayor ya que este juicio probablemente será el único que tenga lugar antes de las elecciones presidenciales, entre los cuatro casos en los que Donald Trump está acusado.
A lo largo de los debates, los jurados han profundizado en los entresijos de una campaña presidencial donde el miedo a un escándalo sexual parecía omnipresente, especialmente después de la revelación de un video donde se escuchaba a Donald Trump presumir vulgarmente de «agarrar» a las mujeres «por el coño.»
Un ex jefe de un tabloide, amigo del multimillonario, testificó que él era sus «ojos y oídos» para cazar cualquier revelación embarazosa, incluso pagando $150,000 a una modelo de Playboy para que guardara silencio sobre una aventura con Donald Trump. El jurado también escuchó una grabación de audio de una conversación privada entre el candidato y Michael Cohen discutiendo este pago.
En cuanto a Stormy Daniels, ella proporcionó detalles de la relación sexual que dice haber tenido con el multimillonario, un acto que, según ella, fue consensuado pero donde la «dinámica de poder» estaba «desequilibrada.»
Pero aunque se ha hablado mucho sobre sexo y dinero, los jurados finalmente tendrán que responder a una pregunta: ¿Ordenó Donald Trump la falsificación de documentos contables para ocultar el pago?