El cuento de los dos Lamborghinis de «The Wolf of Wall Street» dio un giro este mes. Dos ejemplares genuinos de la edición 25 aniversario del Lamborghini Countach 1989 en Bianco Polo fueron protagonistas en la pantalla. Uno de ellos salió ileso de la filmación. El otro, utilizado para demostrar lo poco cuerdo y sobrio que estaba el protagonista Jordan Belfort durante un paseo, terminó destrozado e inutilizable, más como una instalación de arte que como un automóvil.
La ópera comenzó en agosto cuando RM Sotheby’s anunció que subastaría el ejemplar impecable este mes de diciembre. En ese momento no se sabía donde estaba el otro automóvil. A principios de noviembre, Bonhams resolvió el misterio al anunciar que subastaría el automóvil destrozado a fines de ese mes durante el fin de semana de la carrera de Fórmula 1 en Abu Dabi. A pesar de que se esperaba una venta entre $1.5M y $2M, la oferta más alta fue de $1,350,000 durante la subasta en Abu Dabi. El vendedor rechazó esa suma y el automóvil no se vendió.
El automóvil limpio de RM Sotheby’s sí se vendió, y según lo planeado, alcanzando los $1.65M después de los honorarios el 8 de diciembre en la ciudad de Nueva York. No está mal para un vehículo que Hagerty valora en $780,000 en condición de concuros. Lamborghini solo fabricó alrededor de 660 coupés de aniversario plateados para ventas globales, 12 llegaron a los Estados Unidos en Bianco Polo.
La descripción de RM Sotheby’s indica que el dueño de Maryland condujo el automóvil a Nueva York para la filmación, y que este automóvil se especificó un poco diferente al segundo Lamborghini; por ejemplo, este llevaba parachoques europeos más pequeños y su cabina tenía un volante en blanco y negro. El propietario también había quitado el alerón trasero, que fue colocado de nuevo para la película. Lo que los dos automóviles tenían en común era un motor V12 de 5.2 litros que generaba 449 caballos de fuerza y 370 libras-pie de torque, unido a una transmisión manual de cinco velocidades. El propietario vendió el coupé después de que la película dejara su huella, el nuevo propietario, el vendedor para la subasta de RM Sotheby’s, volvió a instalar un parachoques más grande según las especificaciones de EE. UU. y mantuvo el alerón trasero.
Ahora que se ha establecido un punto de referencia, estamos esperando a que el segundo Countach aparezca en un catálogo de subastas. Sospechamos que el vendedor no rechazará $1.35M una segunda vez.
